septiembre 14, 2016
Evalúan detenidamente su propio aprendizaje y experiencias. Se esfuerzan por comprender sus fortalezas y debilidades para así contribuir a su aprendizaje y desarrollo personal.
Entienden la importancia del equilibrio físico, mental y emocional para lograr el bienestar personal propio y el de los demás.
Abordan situaciones desconocidas e inciertas con sensatez y determinación y su espíritu independiente les permite explorar nuevos roles, ideas y estrategias innovadoras.
Muestran empatía, sensibilidad y respeto. Se comprometen a ayudar a los demás y actúan con el propósito de influir positivamente en la vida de las personas y del mundo que los rodea.
Están habituados a buscar y considerar distintos puntos de vista y dispuestos a aprender de la experiencia.
Actúan con un profundo sentido de la equidad, la justicia y el respeto por la dignidad de las personas. Asumen la responsabilidad de sus propios actos y sus consecuencias.
Comprenden y expresan ideas con confianza y creatividad en diversas lenguas, lenguajes y formas de comunicación. Saben escuchar las perspectivas de los demás.
Utilizan habilidades de pensamiento crítico y creativo para analizar y proceder de manera responsable ante problemas complejo.
Se interesan por lo que sucede en el mundo y se comprometen con ideas y cuestiones de importancia local y mundial.
Cultivan su curiosidad natural a la vez que desarrollan habilidades necesarias para la indagación e investigación. Aprenden de manera autónoma, colectiva y con gran entusiasmo.